Investigadoras de IA del MIT advierten sobre la adicción a la Inteligencia Artificial

Dos investigadores de inteligencia artificial del MIT, Pat Pataranutaporn —investigadora del MIT Media Lab que estudia la interacción humano-IA con un enfoque en la psicología de los cíborgs—, y Robert Mahari —candidato conjunto a JD-PhD en el MIT Media Lab y la Facultad de Derecho de Harvard que se centra en el derecho computacional—publicaron conjuntamente un artículo en la revista MIT Technology Review advirtiendo sobre los compañeros de IA adictivos.

En el artículo, los expertos explican que han analizado un millón de registros de interacción de ChatGPT y descubrieron que el juego de roles sexuales es el segundo uso más popular para los chatbots de IA —el primer uso es para la composición creativa— y compartieron sus resultados en un artículo hace solo unos días.

“Ya estamos comenzando a invitar a las IA en nuestras vidas como amigos, amantes, mentores, terapeutas y maestros”, escribieron los investigadores. “La IA ejerce el encanto colectivo de toda la historia y cultura humana con una imitación seductora infinita”.

Pataranutaporn y Mahari están preocupados por nuestro actual experimento masivo que se está desplegando en tiempo real sin un verdadero conocimiento de las consecuencias en nuestra sociedad y como individuos.

“Como investigadoras de IA que trabajamos estrechamente con los responsables de las políticas, nos sorprende la falta de interés que los legisladores han mostrado en los daños que surgen de este futuro”, escribieron las expertas mientras destacaban la urgencia de combinar la ley, la psicología y la investigación tecnológica para la regulación de la IA.

Las investigadoras de IA explicaron que los compañeros de IA se vuelven adictivos porque la tecnología puede identificar los deseos de las personas y su naturaleza sumisa sabe cómo servir a los usuarios según lo deseen. Combinado con los ya existentes algoritmos de redes sociales adictivas y la integración de nuevas tecnologías generativas de IA, las expertas creen que fácilmente puede convertirse en una tecnología extremadamente adictiva.

Mira Murati, directora de tecnología de OpenAI, ha mencionado previamente las cualidades adictivas de su tecnología. Durante una entrevista el año pasado, Murati afirmó que los modelos ChatGPT podrían volverse “extremadamente adictivos” y que como usuarios podríamos llegar a ser “esclavos” de esta tecnología.

Esta advertencia llega solo días después de que OpenAI lanzara su función de voz para usuarios de la versión de pago de su producto, y días después de que una nueva startup se volviera viral por lanzar un nuevo collar de IA llamado Friend que está constantemente escuchando e interactuando con los usuarios.