Microsoft presenta Majorana 1, allanando el camino para la Computación Cuántica Escalable

Microsoft presentó este miércoles su primer chip de computación cuántica, Majorana 1, una tecnología desarrollada durante más de 20 años.

Según el anuncio oficial del gigante tecnológico, el hardware representa la “primera Unidad de Procesamiento Cuántico (QPU) del mundo impulsada por un Núcleo Topológico”.

El chip ha sido diseñado para escalar hasta un millón de qubits—la unidad popular utilizada en la computación cuántica, bit cuántico—y hasta ahora han construido 8 chips.

Uno de los logros más significativos que los científicos de Microsoft lograron alcanzar es el estado topológico, un nuevo estado de la materia que fue propuesto por primera vez en 1997 por el científico ruso americano Alexei Kitaev, según informó el New York Times.

Crearon el primer “topoconductor”, lo que les permitió desarrollar la superconductividad topológica, y combinar aluminio (un superconductor) y arseniuro (un semiconductor) a temperaturas muy bajas, ajustadas con campos magnéticos. La “magia” de sus chips cuánticos.

Microsoft publicó ayer un artículo con los detalles de la innovadora investigación en la revista científica Nature también.

“Esta revolucionaria clase de materiales nos permite crear superconductividad topológica, un nuevo estado de la materia que anteriormente solo existía en teoría”, escribió la Dra. Chetan Nayak, Fellow Técnica de Microsoft y Vicepresidenta Corporativa de Hardware Cuántico.

El gigante tecnológico también compartió un video de la nueva tecnología, explicando cómo concibieron y desarrollaron Majorana 1 y su potencial para el futuro de la humanidad.

En diciembre de 2024, Google presentó su primer chip cuántico, Willow, capaz de realizar cálculos complejos en menos de cinco minutos que llevarían a las supercomputadoras más rápidas de hoy 10 septillones de años.

Ahora, Microsoft se adentra en la carrera de la computación cuántica con un producto completamente nuevo, una estrategia revolucionaria y una investigación pionera. Sin embargo, esta tecnología aún se encuentra en sus primeras etapas, y el chip debe someterse a pruebas y desarrollo extensivos, un proceso que podría llevar años pero, optimistamente, no décadas, como se predijo anteriormente, para determinar si realmente puede acelerar la computación cuántica.